Como me dijo mi psicóloga

Ir a Terapia no es para cualquiera.   A terapia solo van los valientes.   Los que quieren mejorar.   Los que quieren avanzar.   Los que quieren cambiar y romper patrones tóxicos.   Sanar viejas heridas.   Los que se atreven a mirar la mierda de dentro y a sacarla para limpiar.   Para los que abren el armario y tiran la ropa vieja, sucia y que huele a rancio.   Yo voy a ser valiente por ellos.   No fue fácil. Dolió mucho. Y no cualquiera coge ese dolor y lo acepta, lo abraza y lo transforma.   Se merecen a una madre sana, estable, que no los traumatice y los haga ir a terapia de adultos.   El camino es largo, pero vamos pasito a pasito.   Ahora que me doy cuenta de los traumas ajenos, porque ya me conozco a mí misma y se lo que no tolero. Siento pena por ellos, y por sus hijos.   Sobre todo, por sus hijos.   Porqué el que tiene un trauma y no acude a terapia, su hijo lo hará en el futuro.   Y si no va a terapia o repite patrón o se vuelve drogodependiente.   Tener hijos para darles un

¿El secreto de la vida en pareja? ¿Existe?


Estoy viendo un capítulo de una serie. En este capítulo, una pareja de ancianos llega al hospital. Ella está muy mal. Necesita una operación. Llevan muchos años juntos y no quieren perderse el uno al otro. No saben cómo vivir el uno sin el otro. Al final del capítulo hacen una pregunta. Y yo no puedo evitar mirarte en la distancia y hacerme esa misma pregunta.



¿60 años serán suficientes?


Cuando te conocí no me gustabas. O eso creía yo. Pero poco a poco. Con insistencia casi imperceptible, me fuiste ganando. No he sido la mejor de las novias. He cometido muchos errores. Te he herido. Y aunque por ello he pedido perdón y hemos seguido adelante. Todavía hay cosas que no me perdono. Nunca hemos sido la pareja ideal. Tenemos nuestras cosas. Diferencias de opiniones y gustos. A veces nos hemos replanteado el porque nos queremos. ¿Por qué estamos juntos? ¿Qué nos une?



Y un día encontré la solución a esta incógnita.


Nunca hemos sido una pareja idílica. Nuestro primer año de vivir juntos fue un infierno. Casi nos volvemos cada uno a su casa. ¿Te acuerdas?

Cuando decidimos casarnos no fue de cuento de hadas. Ni siquiera querías casarte. Decías que solo era un contrato, un papel inútil. Y en cierta forma tenías razón. Porque emocionalmente no cambia nada.

Ni la boda fue la que soñaría cualquier chica. No hubo una gran boda, ni una gran celebración. Por lo civil y con un vestido rojo, que aún puedo seguir poniéndome. Cosa que me encanta, ya lo sabes. En mi cabeza se juntan satisfacción por ser práctica, y rememorar ese día siempre que me lo pongo.

Miro lo que tenemos ahora y no me arrepiento. Porque tengo lo que quería. Nuestra casa, con nuestro pequeño. Una vida por delante. Un futuro.

Han pasado 15 años, y seguimos sin ser una pareja perfecta, o idílica. Discutimos, peleamos, debatimos. Pero estamos aquí juntos. Siguiendo adelante. ¿Por qué? ¿Qué nos une?

Algunas personas dicen que nadie es la mitad de nadie. Y en parte estoy de acuerdo. Pero en cierta manera no dejo de pensar que uno complementa al otro en ciertas formas. Que cada uno podría vivir sin el otro, unas vidas separadas. Si, seguro. Pero yo no quiero, y seguro que tú tampoco. Porque darse por vencidos sería perder muchas cosas.

Algunas de estas palabras ya las conocerás. Lo hemos hablado. Otras, será la primera vez. Y encima escrito. Pero ya me conoces. Hay cosas, que me es imposible decir con palabras. Porque incluso mientras escribo esto, me brotan las lágrimas. Me emociono. Ya sabes el porqué. Yo, diciendo ñoñerias.  ¿Qué me pasa?

 


Y es que me paro a pensar.


A pensar en el postureo “parejil” que hay hoy en día en Internet. En las fotos o frases, o mensajes, tan bonitos (y diarios), perfectas e idílicas que sube la gente a las redes constantemente. Y pienso en que yo no lo hago. No lo hago porque además de saber y comprender que a ti no te gusta. Y si quieres fotos, quieres que sean entre nosotros. No me siento en esa necesidad de compartir nuestra vida en pareja, de amor y devoción. Además de que ya sabes que este tipo de cosas me agobian. Aunque esas parejas me parecen muy bonitas por fuera. Me cansan, y me hacen preguntarme si son realmente así en la vida real.

Porque creo y ya lo sabes, que me he dado cuenta, de que tiene más importancia preocuparnos en ser buenos padres y buenos marido y mujer. No necesitamos demostrarle al mundo que nos queremos. No necesitamos demostrarle al mundo lo felices que somos. Porque no siempre lo somos. Y no pasa nada. Necesitamos cuidarnos el uno al otro. Y preocuparnos de ser buenos padres. De hacer fotos para el recuerdo, sí. Pero serán nuestros recuerdos. Los que le mostremos en su momento a nuestro hijo. Y no necesitamos nada más.



No soy la persona más cariñosa del mundo. Y no me gusta. Me gustaría aprender a dar más abrazos, y más besos. Pero sabes que eres la segunda persona a la que más abrazo. Lo siento, la primera es nuestro Superboy. Pero supongo que ya lo suponías. Puede que por fuera no lo parezca. Sin querer aparento ser una persona poco afectiva, borde. Es lo que aparento sin querer.

Pero en el fondo no lo soy. Soy emotiva. Cuando confío en alguien sin querer creo un fuerte vínculo que no se rompe. O que me cuesta romper. Ya lo sabes. Las relaciones que he tenido que dejar atrás me han partido el corazón. Y se han quedado con una parte. Lo que no significa que las olvide. Ese hueco siempre está ahí recordándome que no están.

Pero contigo, ¿Qué nos une?


Ya lo sabes. No te voy a contar nada nuevo, nada que no sepas. Pero a veces la gente me pregunta cuál es el secreto. ¿Cuál es ese vínculo tan especial?

No tengo el secreto de la vida en pareja, ni el amor eterno. Sé que las cosas se acaban en algún momento. Por una cosa u otra, una pareja se rompe, se separan. Pero si tuviera que decir nuestro secreto…

Mi secreto…

Cuando estoy mal, deprimida, o feliz. Cuando ha pasado algo y siento la necesidad de contárselo a alguien, la primera persona que me viene a la mente siempre ha sido.

Mi mejor amigo



Ese mejor amigo, que incluso estando enfadado conmigo. Estando separados. Siempre se ha preocupado por saber cómo estaba.

Un mejor amigo, cabezota (aunque yo más) que siempre ha intentado razonar conmigo. Hablar, y explicarme las cosas. Hacerme ver que el mundo no siempre es tan terrorífico y malvado como mis ojos lo ven.

Fuiste, eres y serás siempre mi mejor amigo. Aunque ahora en un papel ponga Marido o padre de nuestro hijo.

Ahora siendo menos ñoña. Estarás conmigo en que, un secreto es la comunicación. Hablar, debatir y discutir. Aunque somos dos personas muy diferentes. Creo firmemente que si dos se quieren harán el esfuerzo por seguir adelante y arreglar las cosas. Pero claro. Seguro que hay ocasiones en que esto no será suficiente. No quiero tener la verdad absoluta. Da miedo. Porque, un poder conlleva a una gran responsabilidad. Y que los Dioses me libren.

Pero creo que son dos buenos pilares para una pareja. Comunicación y confianza. ¿Verdad?

Quiero que sepas, que aún recuerdo cómo en cada aniversario, para tu regalo me pedías siempre lo mismo. “Quiero estar otro año contigo”. Y aunque hace algún tiempo que ya no me pides eso como regalo. Lo tengo presente, y siempre que se acerca la fecha me pregunto si algún día volverás a pedirme ese regalo. O tal vez pediste uno de 30 años y no me he enterado.

No sé tú qué pensarás al leer esto. Pero me gustaría que respondieras a la pregunta.

¿60 años serán suficientes?

 





Comentarios

  1. ¡Ay Dios mío Ana!!!! ¡Es súper bonito me has hecho llorar y todo!!!! Muy inspirador. ¡Cuando quieres eres muy sensible y me encanta!!! ????? Me has hecho revivir recuerdos con aby.

    ResponderEliminar
  2. Precioso lo que has escrito...
    Nosotros decimos, a parte de lo que has dicho por aquí, que formamos buen equipo, nos equilibramos el uno al otro...

    Besos

    ResponderEliminar
  3. Me parece super bonito lo que has escrito, a veces, sacar lo que se tiene dentro y plasmarlo es lo complicado, pero tú lo has hecho genial.
    Por supuesto que no hay una receta mágica ni una pareja perfecta, porque cada cual valora en su pareja una cosa distinta, una virtud, un defecto…
    Pero qué bonito saber que tienes a tu lado a la persona indicada para ti. Porque tú la has elegido y decidiste que fue la mejor para ti.

    ResponderEliminar
  4. Es precioso lo que has escrito y más lo es encontrar a alguien que te despierte todos esos sentimientos. ¡Enhorabuena pareja!

    ResponderEliminar
  5. ¡Me ha encantado Ana!!! Y se nota q lo has escrito de manera natural, tal cual lo piensas y sientes. ¡Enhorabuena!! Las parejas perfectas no existen, solo aquellas que afrontan los problemas juntos.

    ResponderEliminar
  6. ¡Me alegro de que te haya gustado! ¡Últimamente estoy muy moñas... jaja Un besazo!

    ResponderEliminar
  7. Eso es. Hay que formar equipo. Gracias por pasarte guapa. un beso!

    ResponderEliminar
  8. Gracias María. He tenido la suerte de poder elegir, y sobre todo de elegir bien. Que no siempre se puede elegir correctamente. ¡Gracias por pasarte, un besazo!

    ResponderEliminar
  9. ¡Muchas gracias guapa! ¡Un besazo!

    ResponderEliminar
  10. Tienes toda la razón. Los problemas existen. siempre surge alguno. Pero lo importante es saber o conseguir de alguna manera solventarlos. Aunque soy consciente de que no siempre se consigue... Un abrazo.

    ResponderEliminar
  11. Es muy bonito lo que has escrito y me he sentido muy identificada. No se que hacemos juntos nosotros también pero tampoco se que haría sin él.
    Y si, creo que la confianza y la comunicación son fundamentales, sin eso, esta todo perdido.
    Un beso!!

    ResponderEliminar
  12. Muchas gracias! A veces no sabemos que cosas nos unen a una persona, pero la queremos con sus virtudes y defectos. Un abrazo!

    ResponderEliminar
  13. Es lo principal, la amistad, la relación basada en una complicidad mutua. Y también un buen lote de suerte, porque es como un buen chollo, a veces hay que buscar y rebuscar antes de encontrarlo. :)

    ResponderEliminar
  14. Hermoso y real post. Me ha gustado mucho leer su historia llena de amor y de las propias imperfecciones de la vida. No se si 60 años serán suficientes pero los días que viven juntos si lo serán. Les deseo amor eterno. Gracias por compartir la historia.

    ResponderEliminar
  15. Cierto, complicado como la lotería... Un abrazo guapa!

    ResponderEliminar
  16. Gracias a ti por pasarte. Ya veremos si 60 años son suficientes o no.. ¡Un abrazo muy grande!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario