Los terribles dos años. Como sobrevivimos a las rabietas.

Como sabrás, el día 5 de enero Superboy cumplió dos años.

Pero nosotros llevamos sufriendo eso que llaman "Los terribles dos años" mucho antes... Hace unos meses, (antes de su cumpleaños) Superboy comenzó a tener rabietas por cosas que para nosotros son tonterías.

Ya sea porque no queremos tenerle todo el día enfrente de la televisión, porque no queremos darle esa chuchería/bollo/guarrería que quiere, etc.

Al principio estábamos descolocados, la verdad es que no nos esperábamos que llegara esta etapa tan pronto. A veces creo que incluso teníamos la esperanza de que nunca llegase. Pero llegó.

Y nos pilló sin saber qué hacer, como tratar esas rabietas.

La gente nos decía, "no le des lo que quiere o estás perdida. No le hagas caso o estás perdida". Pero yo sentía que no podía dejar a mi hijo llorando.

Aunque reconozco que alguna vez, que me he encontrado con la paciencia justa, he ignorado esa rabieta, hasta que se le pasaba. Ya sé que no está bien, pero soy humana. No soy una persona perfecta, ni una madre perfecta por mucho que me esfuerce.

Aunque fuera por un capricho suyo, tenía que hacer algo para calmarlo. Así que intentaba razonar con él. Hablarle. Pero era inútil. No se podía razonar.

Recuerdo una vez viendo un vídeo de unos Youtubers que sigo desde hace tiempo. Olga y Antuan.

Si has visto el vídeo habrás oído el consejo de Antuan. ¡Abrázalo!

¡Ya sé! Un niño en plena rabieta, puede llegar a sacar lo peor de uno mismo. Nos llevan a los límites de la paciencia. Si los ignoras, gritan, patalean, destrozan. Por eso, precisamente, lo mejor para evitar todo eso, y calmarle es el contacto físico. Un abrazo, un beso, una caricia.

Por experiencia te diré que Superboy muchas veces al querer abrazarlo se enfada más, si puedo sigo abrazándolo. Si no, le hablo y le digo que entiendo su enfado, entiendo su frustración. Le beso, le pido que se calme.

Y cuando lo consigo, si por ejemplo, la rabieta ha sido porque no he querido darle un juguete. Le explico el por qué no se lo doy. Que necesito que primero recoja, los mil juguetes que hay tirados por el salón.

Y pueden pasar dos cosas, la primera es que siga sin querer y vuelva la rabieta, o la segunda. Que haga lo que le he pedido y reciba lo que él quería. Su juguete.

Los niños no son capaces de controlar sus emociones, por esa razón lloran. Porque no conocen otra manera de expresar lo que sienten.

Es trabajo de los padres educarlos, y enseñarles.

Es muy difícil controlar una rabieta en compañía de otras personas, que te dicen. “No lo cojas, no le hagas caso. Si lo haces estás perdida. Ya verás, que mal lo vas a pasar" " Si le haces caso, él gana".

¿Por qué tiene que ser ganar o perder? Se trata de educar, no hablo darle al niño todo lo que quiera porque está llorando y hay que callarlo.

Se trata de enseñarle a controlar sus emociones, y después que entienda que, si quiere ese objeto, o lo que sea que quiera. Ha de ser bajo nuestras condiciones.

"Si quieres postre, tienes que comer. No todo, pero hay que comer."

Aparte de todo yo te voy a contar un pequeño truco personal. Te pongo en situación.

Un día estaba cocinando y Superboy me pedía tenerlo en brazos. Ya no puedo ponerlo en la mochila porque no cabe, así que o lo ponía en una silla cerca para que me viera cocinar o no comíamos... XD

Cuando lo ponía en la silla cerca de mi comenzaba la rabieta, y recordé un vídeo muy gracioso. Una madre en el supermercado que se tira al suelo pataleando y llorando como un niño. Y pensé. "todo es probar".

Comencé a "llorar" diciendo que me dolía el brazo de todo lo que pesaba Superboy. Que no podía tenerlo en brazos y cocinar a la vez. Y en ese momento, dejó de llorar, me abrazó, acarició mi brazo con ternura y seguí cocinando con él a mi lado. Sin llantos, ni rabietas.

Seguramente no es un método muy ortodoxo, pero a mí en ese momento, y en alguna que otra rabieta me sirvió para terminarla del tirón.

Algunas veces nos saldrá bien, otras no tanto. Solo nos queda tener muuuuucha paciencia, y esperar que esta época pase lo más rápido posible.

¿Tu hijo está en época de rabietas? ¿Cómo lo sobrelleváis? ¿Tienes algún truco?

¡Un besazo y Feliz Semana!